Hombres de poca Fe, aparece en la Biblia, no se donde. Preparé un díptico con la misión del madrugador y la oración de la mañana, 12 ejemplares, porque pensé que no íbamos a llegar a ese número, gratísima sorpresa, no se si tal, llegamos los que teníamos que llegar, contra viento y marea a las 7 horas un 1 de enero, ¿lo pueden creer? y eso alegra, anima a seguir con esta locura que partio hace más de veinte años. Me imagino se repitió a lo largo y ancho de nuestro Chile y el mundo. Fuimos 15 los que oramos espontaneamente, agradecimos y ofrecimos lo nuestro, compartiendo nuestras vivencias o reflexionando internamente, fue una madrugada de pocas, pero buenísima. No hubo desayuno, compartimos unas marraquetas con un vaso de bebida, todo felices y contentos. El lugar, el salón de uso múltiple San Miguel Arcangel, a medio construir nos cobijó, vimos salir el sol mientras orábamos, escuchar los que regresaban a casa alegremente después de celebrar la llegada del nuevo año ¡Hombre de poca Fe!





 



DONDE HAY AMOR Y CARIDAD, DIOS AHÍ ESTÁ...